El aeromodelismo de Vuelo Libre es una mezcla de aerodinámica, arte, ciencia, relajación, deporte y camaradería. 

Los modelos de Vuelo Libre se vuelan sin ningún tipo de control mecánico o de radio sobre ellos. Esta es la forma más antigua de aeromodelismo, siendo un hito particular el primer modelo propulsado por una banda elástica, construido y pilotado por Alphonse Penaud en 1871. Desde entonces, siempre ha estado presente la alegría de lanzar un modelo y de conseguir el logro de verlo volar sobre nuestras cabezas en un patrón de vuelo planeado. Las competiciones de Vuelo Libre están determinadas únicamente por la duración total del vuelo lograda en un número determinado de vuelos; el cronómetro es el único juez del éxito. Los competidores siempre se esfuerzan por mejorar los modelos mediante ajustes de diseño y de su equipamiento, para lograr el mayor tiempo de vuelo posible.